Saludos. La percepción de ahora es la intuición de estar entrando en una dimensión desconocida, la curva espacio-tiempo se dobla y todos adquirimos distintas tonalidades, azuladas sombras, destellos psíquicos que nos iluminan. El confinamiento mundial nos invita a un recogimiento interior en el que poder nutrir o esconder nuestras pulsiones soterradas e internas, que pueden oflorar o no o convertirse en potencia de algo más allá del acto. Éste no es el objetivo de ningún trabajo espiritual, es tan sólo una constante ahora en el replegado mundo interior que cobra vida y pugna por expresarse: todo lo raro, lo extraño, lo recóndito, lo oculto y lo misterioso de nuestra psique está en plena ebullición, está en plena efervescencia, momento creativo o para conocerse a uno mismo.
NO HAY UN MOMENTO MEJOR PARA SER LO QUE NO SABEMOS QUE SOMOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario