TEVEL

Saludos. El sistema gnóstico del siglo IV después de Cristo, establece suficientes cosmogonías y teofanías cómo para resultar interesante al investigador. Desde la escuela de Simón el Mago, considerado el primer místico, hasta el pitagorismo y la influencia de Platón, considerándose Pitágoras un gnóstico más, las ideas griegas y helenizantes se mezclaban con ideas cristianas y se sincretizaban también con las filosofías orientales y el sistema de reencarnaciones, sin confrontación, integrando conceptos.

Para los primeros cristianos es sabido que la idea de la reencarnación era más que suficiente para explicar el más allá y la transmigración de las almas y después de un Juicio en otro Estado de Conciencia en los Panos Mayores, el alma pasaba a reencarnar después de haber conocido al Maestro, después de haberse reunido con Jesucristo, para seguir así su evolución en el planeta Tierra o quizás en otros, en otros de los 70 planetas donde hay vida y están gobernados por Dios cómo anuncia la Cábala.

El planeta Tierra es un lugar intermedio de alta densidad, pero es mayormente considerado un lugar de castigo, aunque la palabra sería purificación.

De los setenta planetas en los que se puede encarnar después de vivir, la Tierra, llamada por los ángeles Tevel porque es el único lugar del universo donde se puede comer pan y por eso el pan es sagrado en todas las culturas y en todas las religiones y Tevel viene a significar en el lenguaje angélico algo así cómo "El pan", la Tierra es un lugar de purificación, un planeta de gran densidad (materia) creación del Demiurgo que nos ancló y nos apresó en la materia porque así está establecido por nuestro nivel de evolución. La Tierra es un lugar de purificación, existen otros planetas donde sus habitantes son puro espíritu y no tienen que sufrir los rigores de la edad, el dolor, el envejecimiento y la muerte, pero tampoco conocen los placeres que puede proporcionar la materia y a menudo son tentados por ello. Esos planetas son Reinos Elevados donde encarnan allá las almas buenas, las almas mejores, para vivir un futuro número de reencarnaciones después de haber pasado por la prueba de vida de experimentar sucesivas reencarnaciones en el planeta Tierra ( Tevel)