En esta
especie de matriarcado que es España en la que son las mujeres las que mandan,
se están dando fenómenos curiosos. Cómo las mujeres tienen potestad sobre sus
maridos y sus hijos, las quincuagésimas con hijos ninis les están dando en
matrimonio a otras quincuagésimas en soltería. Hemos conseguido colocar a mi
sobrino Pedrín--nosotros le llamamos cariñosamente, Pedradín--que no estudiaba
ni trabajaba y ya tenía veinte años, entregándoselo en matrimonio a una señora
de mucho dinero que tiene posibles. Le hemos dicho a la mujer que es
virgen--ella no, el niño--para que le haga más ilusión.
Cómo un
curso en la universidad está en torno a los 3000 euros, nos garantizamos así
que el niño estudie. Mi abuelo se conformaba conque acabara el bachillerato--yo
no, el niño--pero es que mi abuelo es de una época en la que el bachillerato
era culturalmente equivalente a un curso universitario actual, está muy
anticuado el hombre. Le hemos puesto al lado del piano para que haga bonito, es
así cómo una cosa cultural.
Mi tía
dice que por qué no hacemos cómo en los Estados Unidos--cómo en las películas
de Estados Unidos, se entiende--y nos hacemos una cartilla ahorro universidad
para el niño y vamos metiendo entre todos unas pesetillas para que el niño
estudie cuando tenga 30 años, que será cómo si tuviera veinte, porque ahora es
cómo si tuviera doce. Con todo no ha colado lo que era virgen cuando le hemos
dado en matrimonio a la señora. Los hombres de la casa no hemos podido hacer
nada porque estamos en España y mandan las mujeres, y bueno, así trabajamos
menos, total: tampoco hay tanto trabajo...
Mi tía es
bastante lista y tiene razón con su idea de hacer una
cartilla-ahorro-universidad, seguro que le va a vender la idea a los bancos,
cuando sea el momento oportuno, es decir, cuando los jóvenes entiendan que no
se puede ir a la universidad por 8000 pesetas curso cómo en los años 90,
porque, para empezar, no existe la peseta y si no hay dinero ni para que una
señora de Castilla la Mancha
no se muera a las cuatro de la mañana porque no hay urgencias, pues, la
verdad...Esto es ya cómo una guerra...¡A las cuatro de la mañana no es hora de
morirse! Yo también lo entiendo, pero es que es Dios quién decide estas cosas,
aunque ser viejo ayuda mucho, todo hay que decirlo. ¿Acaso no pensamos que un
café que cuesta 1,50 es cómo si costara 150 pesetas! ¡Pues pensemos todos que
8000 euros son 8000 pesetas! (Escribo desde España)
LAS
QUINCUAGÉSIMAS ESTÁN SALVANDO ESPAÑA y cómo son las únicas que tienen dinero en
este país, ahora están pidiendo en matrimonio a otras quincuagésimas sus ninis,
todo muy educado y respetable, cómo en el siglo XIX cuando los hombres mandaban
y te daban a su hija en matrimonio si les caías bien--y si tenias dinero,
claro..."Te llevas una joya. Es muy limpia. No come, casi..." y todas
esas cosas tan simpáticas y luego cuando se quedaban viudas se metían en un
convento y hacían canapés, era una especie de trata de hijas pero no era delito
porque eran otros tiempos.
¡Si por
los menos hubiéramos hecho cómo este buen señor de las noticias que había
puesto 22 millones en su hija... o en su iza ! (no me he enterado bien)
Ahora que
son otros tiempos, es curioso cómo más de una señora y más de dos usan su poder
e influencia para llevarse a la cama a los chavales de otras señoras, los
maridos no dicen nada porque para empezar no son ni maridos, son compañeros y
cosas así, cómo si en vez de estar casados hubieran fundado un partido de
derechas.
¡Si por lo
menos...
A mi me
parece bien, la verdad, porque creo que es bueno para la economía. Una señora
se libra del parásito de su hijo y otra se lo folla, hablando mal, pero luego
todo ésto con mucho amor, porque el chico aprenderá algo que no se aprende en FP
Superior, para mi torrefacto.
No te
preguntes lo que tú país puede hacer por ti, sino lo que tú puedes hacer por tu
país...
Tengo un
amigo que está horrorizado conque apoye estas cosas y me hace una simple
pregunta que ahora pongo sobre el tapete (quitad las cartas)
¿VAMOS
A APOYAR UNA IDEA SIMPLEMENTE PORQUE FUNCIONE?
No hay comentarios:
Publicar un comentario