Saludos, las enseñanzas cabalísticas distinguen entre un aspecto masculino y femenino superior y el aspecto masculino y femenino inferior. Dentro de la propia sexualización se entiende que existe una baja y una alta energía, una alta energía en lo que entendemos que tiene que ser un hombre y una baja energía en lo que entendemos que tiene que ser un hombre y también una baja energía en lo que entendemos que tiene que ser una mujer y una alta energía en lo que entendemos que tiene que ser una mujer. La cábala enseña que estas dos energías tienen que ser integradas y ninguna desechar a la otra, se trata en metáfora de ser amado tanto por el Mundo de Arriba cómo por el Mundo de Abajo, integrar la propia oscuridad, integrar la propia sombra, para ser un ser humano completo y realizado.
Los aspectos tanto masculinos cómo femeninos se encuentran en la propia persona independientemente de su sexo, en orientalismo se conoce ésto como el Ying y el Yang. Un hombre puede tener aspectos de una baja energía femenina y una mujer puede tener aspectos de una alta energía masculina, independientemente de su orientación sexual.
Los elementos definitorios constructivos o destructivos, en la Luz o en la Sombra, hacen de la persona un tipo determinado que a la hora de encarnar debe hacerlo en el lugar exacto y concreto que le requiera su nivel de densidad. De esta manera una persona primitiva y en cierta manera animalizada, poco espiritual y de gran densidad, reencarnará en un planeta que guardaría un aspecto parecido con la serie "Juego de Tronos", un planeta violento en una especie de Baja Edad Media y siempre en guerra, pues todo se hace por el bien del individuo y se trata de que el individuo en cuestión llegue al lugar en dónde tiene que estar, es decir: el lugar en el que será más feliz. ES DECIR NO HAY PREMIO NI CASTIGO, TRAS LA REENCARNACIÓN SÓLO SE BUSCA EL LUGAR MÁS ADECUADO PARA LAS CARACTERÍSTICAS QUE PRESENTA EL INDIVIDUO, TODO ÉSTO SEGÚN LA CÁBALA. Existen 70 planetas en los que reencarnar tras la muerte, lo que sucede es que 70 es un número cabalístico que puede indicar infinidad de planetas.
Los aspectos tanto masculinos cómo femeninos se encuentran en la propia persona independientemente de su sexo, en orientalismo se conoce ésto como el Ying y el Yang. Un hombre puede tener aspectos de una baja energía femenina y una mujer puede tener aspectos de una alta energía masculina, independientemente de su orientación sexual.
Los elementos definitorios constructivos o destructivos, en la Luz o en la Sombra, hacen de la persona un tipo determinado que a la hora de encarnar debe hacerlo en el lugar exacto y concreto que le requiera su nivel de densidad. De esta manera una persona primitiva y en cierta manera animalizada, poco espiritual y de gran densidad, reencarnará en un planeta que guardaría un aspecto parecido con la serie "Juego de Tronos", un planeta violento en una especie de Baja Edad Media y siempre en guerra, pues todo se hace por el bien del individuo y se trata de que el individuo en cuestión llegue al lugar en dónde tiene que estar, es decir: el lugar en el que será más feliz. ES DECIR NO HAY PREMIO NI CASTIGO, TRAS LA REENCARNACIÓN SÓLO SE BUSCA EL LUGAR MÁS ADECUADO PARA LAS CARACTERÍSTICAS QUE PRESENTA EL INDIVIDUO, TODO ÉSTO SEGÚN LA CÁBALA. Existen 70 planetas en los que reencarnar tras la muerte, lo que sucede es que 70 es un número cabalístico que puede indicar infinidad de planetas.
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