Los aspectos del conocimiento esotérico son tres y por este orden:
PROBACIÓN
ILUMINACIÓN
INICIACIÓN
La base del conocimiento esotérico consiste en lo siguiente: primero hay siempre que observarse cómo si uno fuera un extraño y así lo secundario se separa de lo esencial.
Los instantes de recogimiento son siempre para encontrar una vida más elevada, estos espacios de recogimiento e instantes de aislamiento son para encontrar una percepción de la vida completamente nueva.
El mundo interior crece para superarse, el conocimiento es el propio mundo interno. Tenemos que separar los profundos y provechosos pensamientos de los que no son importantes, sólo así seremos fecundos.
Se tiene que vivir sin irritaciones, sin impacientarse y sin sentir temor y confiando siempre en Dios y en su Gran Sabiduría que es dispensa para nosotros, se le llama a ésto entrar en el sendero de la calma que es luz, la serenidad hace posible que no nos dejemos dominar por la vida y nuestros egos.
Siempre impertérritos pase lo que pase a nuestro alrededor y suceda lo que suceda, todo es un sueño, nada es real, sólo importa nuestro mundo interior que es unión con Dios y desde aquí se distribuye el conocimiento, aquí nace el hombre superior, mucho más controlado y dueño de sí mismo.
Se debe saber que las impresiones del mundo exterior inciden en uno sólo cómo la voluntad propia quiere que aquello se determine.
La contemplación y el silencio es la actividad del pensamiento.
Humildad ante Dios ante la Naturaleza y ante todo.
El mundo mental al relevarse se hace más elevado y más cierto que las cosas materiales.
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