Saludos. Es lógico que todos vivamos en azoramiento y confusión sin poder controlar nada de lo que sucede a nuestro alrededor, sin ningún poder para poder determinar subvertir el acontecer previsto en las agendas del Poder Mundial.
Nos encontramos en un interín en el que el sistema se está agotando y sin embargo no existe ningún nuevo modelo de reemplazo.
Terminado el viejo sistema, el nuevo todavía no existe y atravesamos un periodo en el que nadie sabe qué es lo que va a suceder, lo que va a pasar, lo que va a condicionar nuestra futura existencia.
La realidad es que ni las propias élites que gobiernan el mundo y que están enfrentadas entre sí, saben a ciencia cierta qué es lo que va a pasar, nadie tiene una bola de cristal y por eso todos nos interesamos y buscamos y creemos en aquellos que parecen tener una bola de cristal, pero esta tendencia tiene que ser revisada y puesta en examen y control.
Ahora, de alguna manera, toca ser mucho más inteligentes, mucho más lógicos y tener un pensamiento mucho más estratégico tanto a nivel personal cómo a nivel local, regional y mundial. No podemos esperar a que nos sobrepasen los acontecimientos para luego actuar. La calma y la buena voluntad deben tratar de imponerse y la paciencia tiene que ser una gran virtud aunque todos estemos cansados y hartos de esta crisis que dura más de quince años y que no se acabará hasta el 2025 y que según algunos pesimistas de la economía, culmina con el fin del capitalismo que se renueva cada 250 años y en el fin de ciclo en el que estamos el cambio puede no llegar a suceder hasta entrado el 2030, los egos están incómodos, los egos quieren soluciones y la sociedad se dedican entretenerse de manera frívola y superficial haciendo un uso y a veces un mal uso de las nuevas tecnologías.
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