sábado, 20 de julio de 2013

EL MUNDO ES UN GRAN NEGOCIO, SEÑOR BOILE

NETWORK


Saludos. La película de Owen Roizman protagonizada por Faye Dunaway y William Holdem, en su día me pareció perfecta.

Ahora, es curioso cómo puede entenderse.

Estados Unidos estaba pasando la crisis petrolífera de los años 70, Arabia Saudita había invertido muchísimo dinero en Estados Unidos y la crisis petrolífera favorecía sus intereses. Repunta la delincuencia, la clase media se empobrece. La gente tiene miedo y se queda viendo la televisión en su casa.

Un locutor enferma de mesianismo y empieza a DECIR LA VERDAD y todo el mundo le sigue y la empresa de noticias NETWORK que iba a la bancarota al final se hace multimillonaria por un iluminado que al final incomoda.

Las multinacionales contratan a un persuasivo charlatán para que le convenza de que el mundo no es más que un gran negocio y nada más.

Y ASISTIMOS A UNO DE LOS HITOS DEL CINE

Lo que se conoce cómo el discurso denominado "El mundo es un gran negocio, Señor Boile" en el que un gran persuasor usa su dialéctica para convencer a una persona moral que encarna el bien de que el mundo no es más que un gran negocio. Un acierto de guión, que se estudia en cinematografía cómo ejemplo y modelo y sobre el que los intelectuales hicieron correr ríos de tinta en su día y quizás pronto.

A la base el discurso del persuasor es imagina que no hay fronteras, imagina que no hay países e imagina que todo son intereses económicos e imagina que todo está bajo control e imagina que en el fondo tampoco se quiere el mal de nadie, sólo es necesario que los sistemas se reajusten, pero la gente siempre será entretenida y divertida. El mundo es un gran negocio y las multinacionales mandan, quitan y ponen gobiernos, hacen guerras, REVOLUCIÓN, lo que haga falta...Somos peones y creemos que somos libres pero SÓLO SOMOS PEONES...

"He visto el rostro de Dios" dice el señor Boile tras escuchar el discurso y llora de emoción.

UNO DE LOS GRANDES HITOS DEL CINE CON MENSAJE

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